Es febrero.
Las previsiones meteorológicas predicen una bajada de temperaturas, una masa fría de aire ártico entrará en breve por el norte de la península y nos dejará heladas, frío y viento, y ante tal predicción, yo solo puedo pensar «Al diablo con el frío», tengo abrigos, y algunos de ellos son de otro planeta!.
No puedo dejar de frotarme las manos. Me va el frío, me va el «layering» en el más literal de sus significados, soy fan de las botas, los guantes y las bufandas. Soy fan de la nueva generación de abrigos, esos que casi no necesitan nada más debajo, por que gracias a Dios, en estos últimos años han ganado la importancia que se merecían en nuestros looks invernales y, afortunadamente, hablan por si mismos.
Desde los borreguitos en tonos pasteles, hasta la sobria gabardina, han adquirido un empaque digno de pasear por los Streetstyles de las pasarelas de la moda en pleno invierno.
Con estampados Arty, en cuadros megalómanos, con corazón de plumas, con brocados románticos, anudados a la cintura con cinturones o riñoneras, en tejido técnico, o gabardinas de carácter retro… todos y cada uno de ellos estan pensados para que lo que lleves debajo sea puro teatro.
En cuestión de estilismo, nada importa más que tu abrigo cuando el frío sale a la calle, y si no me crees aquí te dejo las pruebas. Inspírate, reinventa tu abrigo, ponle un cinturón o pasea tu plumas de esquiar por la «city». Tienes todas las de ganar.
ReUse 